¿Qué puedo comer después de tomar un laxante?

Escrito por Luis Malavé ; April 12, 2018

Los laxantes son medicamentos que estimulan la movilidad intestinal y por lo tanto la evacuación de desechos a través de la defecación o eliminación de heces.

Si tu número de evacuaciones semanales son de menos de 3 veces o ingeriste alimentos que ralentizan tu movilidad intestinal de manera sustancial, es posible que tu médico te recete el consumo de algún tipo de laxante.

Existen cuatro tipos principales de laxantes, como son los laxantes formadores de volumen, laxantes osmóticos, laxantes estimulantes y laxantes ablandadores de heces o salinos.

Al usar este tipo de medicamentos, es necesario modificar tu dieta diaria para no crear problemas. Te damos algunos tips para que te orientes.

Elimina la cafeína

Si eres un consumidor moderado o alto de cafeína debes reemplazar las bebidas que contengan esta sustancia por otras más neutras como agua, hierbas o té descafeinado, jugos y sopas.

La cafeína puede aumentar el riesgo de deshidratación, lo que hace más difícil el proceso de evacuación intestinal. La cafeína en exceso también puede provocar dolores gastrointestinales y diarrea durante el tratamiento con laxantes.

Algunos té de hierbas, como el de Diente de León, tienen efectos diuréticos, lo que los hace poco recomendables para quienes están usando un laxante.

Aumenta tu consumo de fibra

La fibra vegetal es un valioso recurso para estimular la movilidad intestinal y ayudar a limpiar los intestinos delgado y grueso.

Durante un tratamiento con laxantes, se recomienda comer mayor cantidad de verduras, frutas, hortalizas de hoja, frambuesas, moras, el brócoli, las alcachofas, los guisantes y los plátanos e higos.

También la lechuga, acelga, zanahorias crudas y espinacas, así como los espárragos, remolachas, champiñones, nabos y calabazas o auyamas tienen alto contenido de fibra vegetal.

Legumbres como las lentejas, frijoles negros o rojos, arvejas, habas y garbanzos, así como nueces y semillas como las almendras, pistachos y semillas de girasol son una gran fuente de fibra natural.

En países tropicales la yuca, mandioca y tubérculos similares, aunque ricos en almidón, también tienen altos contenidos de fibra vegetal y son muy usados en sopas, muy útiles para los casos de estreñimiento.

Por otro lado, debes reducir el consumo de alimentos altos en azúcares o grasas como el queso, alimentos procesados ​​y dulces porque aumentan la posibilidad de sufrir estreñimiento.

Come por lo menos 38 gramos de fibra al día si eres hombre y 25 gramos de fibra al día, si eres mujer. También come un mínimo de 2 tazas y media de verduras y 2 tazas de fruta.

La leche, suplementos herbarios y medicación

Dependiendo del laxante que te recetó el medico, puedes tomar leche pero quizás debas ajustar el momento en que la consumirás.

Por ejemplo, en el caso de quienes se laxan con tabletas de bisacodilo no se debe tomar leche justo antes de ingerirlas, pues hacen que las tabletas se disuelvan muy rápido y aumente el riesgo de irritación estomacal.

Si sueles consumir suplementos herbales o algún tipo de medicamento por otra condición de salud previa, debes consultar a tu médico para que te recomiende el mejor horario de consumo del laxante.

Una regla general recomienda en todo caso que las medicinas o suplementos sean consumidas dos horas antes o después de los laxantes.

No consumas alcohol

El consumo de alcohol está contraindicado durante un tratamiento con laxantes, pues aumenta la deshidratación del cuerpo a través de la eliminación de agua por vía renal.

Ignorar esta recomendación puede exponerte al riesgo de sufrir una fuerte deshidratación y desequilibrios electrolíticos debido a que los niveles de potasio se reducen en la sangre al tomar laxantes salinos y osmóticos.

Un bajo nivel de potasio también puede reforzar aún más el problema del estreñimiento, y provocar fatiga, debilidad, arritmia cardíaca e incluso parálisis y muerte en casos extremos.

También te puede interesar: Ideas sencillas para un desayuno bajo en grasas

Esto se debe a que los laxantes salinos toman el agua que está en el colon para provocar la evacuación rápida de heces, mientras que los laxantes osmóticos alteran los flujos de fluidos entre la zona ventral baja del cuerpo y el intestino grueso para cumplir su propósito.

Lee también: Plan de dieta bajo en carbohidratos y bajo en grasas

Si tienes diabetes, es necesario vigilar el desequilibrio electrolítico al tomar laxantes osmóticos.

ADVERTENCIA: Este artículo no debe considerarse como un equivalente de una consulta médica profesional. Consulte a su médico de confianza ante cualquier duda sobre este u otro tema relacionado con su salud.

Muyfitness
×