Cómo proteger tu cabello en un sauna seco

Escrito por Lindsay Champion ; May 10, 2017

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Los saunas han sido populares en la sociedad escandinava durante más de 2,000 años, afirma la Clínica Mayo y se los promociona como un tratamiento para el dolor crónico. Un sauna seco es diferente del húmedo, ya que la humedad no se extiende en el aire a través de piedras calientes. En su lugar, un radiador, una luz infrarroja u otra fuente de calor se usa para proporcionar calor y humedad en el aire. Con el calor húmedo, el cabello puede quedar encrespado si bien no se produce ningún daño permanente. Para protegerlo de esta condición debes cubrir el cabello tanto como sea posible y aplicar productos para manejarlo.

Aplica un suero suavizante que contenga silicona. Exprime una cantidad del tamaño de una moneda de diez centavos en la palma de la mano y luego frota las manos para distribuirlo en forma homogénea. Pasa las manos sobre el cabello y péinalo suavemente para extender la solución en forma homogénea. Si tu cabello queda graso o plano fácilmente, evita usar el suero en las raíces o en el cuero cabelludo.

Envuelve el cabello en una toalla, con una gorra de ducha o de natación para evitar que entre en contacto con el calor y la humedad mientras te encuentras en el sauna. Ziger Saunas sugiere que uses una gorra hecha de fieltro para evitar que el calor dañe el cabello.

Permanece en el sauna durante 15 a 20 minutos como máximo. Si estás durante más tiempo este puede causar deshidratación.

Aplica un acondicionador humectante sobre tu cabello después de salir del sauna. Deja el acondicionador durante cinco a diez minutos.

Enjuaga el acondicionador del cabello con agua fría, para obtener un cabello suave y manejable que no se encrespe.

Consulta a un médico antes de usar el sauna; según la Clínica Mayo, las personas que padecen una insuficiencia cardíaca congestiva y otras afecciones médicas no deben usarlo.